¿QUÉ SON LAS FACHADAS VENTILADAS?
Se denomina fachada ventilada o transventilada al procedimiento constructivo que establece una separación física entre la pared interior del edificio y el cerramiento exterior del mismo. Este espacio resultante forma una cámara capaz de renovar el aire existente entre la hoja interior y exterior de la fachada reportando con ello importantes ventajas en lo relativo a la eficiencia térmica y acústica del inmueble. Estos aspectos unidos al resto de ventajas funcionales y posibilidades estéticas, sitúan a este sistema de cerramiento como el favorito entre arquitectos y constructores debido a su incomparable calidad.
¿Tienes un proyecto de reforma o rehabilitación en mente?
¿CÓMO FUNCIONA UNA FACHADA VENTILADA EL EFECTO CHIMENEA?
En los meses de verano, la radiación solar incide sobre la capa exterior de la fachada o revestimiento en lugar de hacerlo sobre el muro interior o cerramiento. Este hecho provoca un aumento de la temperatura del aire alojado en el interior de la cámara. Al disminuir la densidad del aire producto del aumento de temperatura este comienza a fluir de manera ascendente abandonando la cámara por su parte superior y ocupando su lugar un aire freso y renovado. A este fenómeno físico que evita la acumulación de calor en el interior de la cámara se le conoce como ‘efecto chimenea’ y conlleva un importante ahorro energético en lo que a climatización se refiere además de contribuir a mejorar considerablemente el nivel de confort en el interior de las viviendas.
En invierno, el efecto producido por la incidencia de la radiación solar en climas oceánicos como el de A Coruña y Vigo es insuficiente como para llegar a provocar el efecto chimenea. De este modo, la densidad del aire se mantiene en niveles que impiden su evacuación por la parte superior de la cámara actuando esta como un sistema acumulador de calor que, junto con la capa de aislante térmico anclada al muro interior, evitan los escapes de calor. Los ahorros energéticos en este caso son considerables, pudiendo llegar incluso hasta el 45% de rebaja en los equipos de calefacción.
INSTALACIÓN DE LAS FACHADAS VENTILADAS
Las fachadas ventiladas están compuestas por un muro de soporte también denominado hoja interior sobre el que se proyecta una capa de aislante térmico. A esta fachada existente se fija una estructura metálica que normalmente está compuesta de aluminio o acero inoxidable y que soportará el revestimiento exterior consistente en una hoja externa no estanca que no necesariamente tendrá un grosor destacado.
La subestructura destinada a separar ambas hojas posibilita la existencia de una cámara de aire de pocos centímetros que se sitúa entre el aislamiento interno proyectado en la pared interior y el propio revestimiento exterior. Esta cámara de aire es la que permite el llamado efecto chimenea, al disponer las placas instaladas de juntas que facilitan el flujo de aire. Por su parte, la piel exterior de la fachada dispondrá además de aberturas o ranuras en su parte inferior y superior, con objeto de permitir la renovación del aire en el interior de la cámara.
Se trata de un sistema que además posibilita la instalación de sus elementos en seco al disponer de una sustentación mediante anclajes mecánicos. Un hecho que permite obtener además importantes rendimientos de entre 30 y 60 metros cuadrados al día en lo que a ritmo de instalación se refiere.
MANTENIMIENTO FACHADAS VENTILADAS
A la finalización de la obra de instalación se realiza un lavado inicial para eliminar por completo la suciedad derivada del proceso de montaje y garantizar el correcto funcionamiento de la cámara de aire y su efecto de ventilación tipo chimenea.
A partir de entonces, el mantenimiento de la fachada ventilada se realiza de manera muy sencilla y económica ya que este suele limitarse a la realización de una limpieza aproximadamente cada 5 años mediante la aplicación de agua a presión por parte de personal cualificado. Para complementar un perfecto mantenimiento, también es aconsejable la realización de inspecciones visuales periódicas por parte de profesionales, normalmente anuales o bianuales, para prevenir la aparición de erosiones en piezas aisladas o pérdidas de mortero entre las juntas.
En cualquier caso, el mantenimiento de las fachadas ventiladas resulta muy poco costoso y, en ocasiones, prácticamente nulo para las comunidades de vecinos, limitándose normalmente a las limpiezas e inspecciones periódicas anteriormente mencionadas, debido a que estas suelen permanecer inalterables tanto al paso de los años como a las inclemencias del tiempo.
BENEFICIOS DE LAS FACHADAS VENTILADAS
No es casualidad que la mayoría de arquitectos coincidan en catalogar este sistema de cerramiento como el más eficiente y el de mayor calidad de entre las diferentes soluciones existentes.
La eliminación de humedades, los ahorros energéticos, el aumento del nivel de confort térmico y acústico, su durabilidad y bajo coste de mantenimiento así como la amplia variedad materiales seleccionables para sus acabados y estética sitúan a las fachadas ventiladas un paso por delante del resto de soluciones constructivas para la rehabilitación de edificios de viviendas e inmuebles.
AISLAMIENTO ACUSTICO
Estudios especializados cifran en hasta un 40% la reducción en lo que a contaminación acústica se refiere tras la instalación de este tipo de cerramiento. Los ruidos provocados por el tráfico, las industrias, los locales de ocio o los aeropuertos dejarán de representar un problema para nuestro descanso por lo que se contribuirá también a eliminar sus efectos negativos asociados como el estrés, el cansancio, el dolor de cabeza o la falta de concentración.
INSTALACIÓN MUY FÁCIL
La sencillez del proceso de instalación radica en el hecho de que las piezas o aplacados se ensamblan en seco mediante sistemas de enganche mecánico. Este proceso, no solo evita los problemas de escombros y los costes asociados a su retirada, sino que además permite intervenir únicamente en piezas individuales en caso de que estas se dañen o erosionen, reduciendo de este modo los costes por reparación en comparación con otros tipos de cerramiento.
EFICIENCIA ENERGETICA
Se trata del sistema que ofrece mayores niveles de ahorro energético en calefacción y aire acondicionado (entre el 40% y el 45% ) Además, estos niveles de ahorro se incrementan año tras año debido a las constantes subidas de la energía en nuestro país, lo que hace que la inversión realizada llegue a rentabilizarse en cortos periodos de tiempo.
IMPERMEABILIZANTE
El efecto chimenea que incorpora este tipo de sistema posibilita la salida del vapor de agua del interior de la cámara eliminando los problemas de humedades en fachadas y viviendas propios de climas oceánicos y suboceánicos como los registrados en A Coruña y Vigo.
INVERSIÓN PARA TODA LA VIDA
La enorme calidad y durabilidad de este tipo de sistema permite que permanezca inalterable tanto al paso del tiempo como a las inclemencias meteorológicas. Este hecho garantiza su enorme competitividad en comparación cualquier otra solución de rehabilitación en lo que a rentabilización de la inversión inicial se refiere.
AHORRO EN MANTENIMIENTO
El ahorro a nivel de mantenimiento constituye otra de las grandes ventajas de este tipo de solución constructiva. Su limitación a una serie de inspecciones visuales y limpiezas regulares de la cámara mediante agua a presión hace que su coste de mantenimiento sea prácticamente nulo a lo largo de los años.
AISLAMIENTO TERMICO
La cámara de aire entre la hoja interior y exterior de la fachada actúa como un excelente aislante térmico, garantizando una temperatura agradable en las viviendas tanto en los meses de inverno como en la época estival y aumentando notablemente los niveles de confort.
REVALORIZACIÓN DEL INMUEBLE
El ‘efecto revalorización’ una vez instalado este tipo de cerramiento es totalmente inmediato. Al mejorar notablemente los niveles de aislamiento térmico y acústico, así como la impermeabilización y la estética del edificio se produce un incremento asociado en el valor de mercado del inmueble y, a su vez, de las viviendas del mismo.
GRAN VARIEDAD DE ACABADOS
Otra de las grandes ventajas de este sistema reside en la enorme variedad de acabados que nos permite seleccionar. Piedra natural (especialmente granito), ladrillo cara a vista, madera, cerámica, panel composite o panel sandwich son solo algunos de ellos.
FACHADAS VENTILADAS PRECIO M2
Son múltiples los aspectos que influyen a la hora de determinar el precio de una fachada ventilada, pero todavía son muchos más los factores que tendremos que tener en cuenta a la hora de valorar el retorno de la inversión realizada en la misma.
En lo que respecta únicamente al importe de la instalación, obviamente, el presupuesto variará dependiendo del tipo de materiales empleados. Como es lógico, una fachada ventilada de piedra será más costosa que otras soluciones como el panel sandwich o el panel composite. El tipo de aislamiento térmico a emplear para el revestimiento interior (lana de vidrio, lana de roca, poliestireno extruido, etc.) también será un factor a tener en cuenta a la hora de realizar la valoración económica. Lo mismo sucede con la naturaleza de la fachada existente ya que esta determinará la dificultad de instalación dependiendo de sus relieves y prominencias. Por último, las dimensiones tanto del muro a revestir como las de las placas individuales a instalar en la composición del cerramiento exterior también tendrán una influencia sobre el precio final, siendo los tamaños mayores en ambos casos los que permitirán rendimientos más económicos por metro cuadrado.
A la hora de hablar del retorno de la inversión realizada en términos puramente económicos, el ahorro a nivel de eficiencia energetica en calefacción y aire acondicionado oscila en un rango de entre el 30% y el 40%, siendo en algunos casos incluso superior dependiendo de la climatología, la orientación de la fachada, etc.
Otro aspecto a tener en cuenta es sin duda la revalorización que sufren las viviendas una vez realizadas las obras de rehabilitación, ya que el valor de mercado de estas puede llegar a incrementarse incluso hasta un 25% si se acompaña de otras actuaciones en cubierta o de mejoras en instalaciones térmicas, eléctricas, carpintería exterior, acristalamiento, etc.
Por último, el método de financiación es otro de los factores clave a la hora de valorar este tipo de inversión. Estudios recientes del Ministerio de Fomento en su Boletín Especial sobre Rehabilitación cifran en tan sólo un 6.8% las personas que barajan solicitar Subvenciones a la Rehabilitación de entre aquellas que tiene previsto realizar reformas en sus edificios en los próximos meses. A este hecho habría que añadir las sustanciales mejoras que tiene previsto introducir el nuevo Plan Estatal de Vivienda 2018-2021, que se hará efectivo durante los próximos meses mediante Real Decreto y para el que el Gobierno ya ha preparado un borrador. A través de esta reforma, pasarán a ser subvencionables las actuaciones para la mejora de la eficiencia energética en viviendas anteriores a 1996, en lugar de serlo las intervenciones en construcciones anteriores a 1981 como hasta la fecha. Asimismo, pasan a incluirse también como subvencionables las rehabilitaciones energéticas en viviendas unifamiliares, que se unen de esta manera a los edificios de viviendas ya recogidos en el plan anterior. En lo relativo a las cuantías máximas subvencionables también se observan incrementos sustanciales, pasando de 2.000€ a 8.000€ por vivienda en el caso de los edificios y estableciendo un máximo de 12.000€ para las viviendas unifamiliares. Además, el porcentaje máximo subvencionable del presupuesto de ejecución material también ascenderá de un 35% a un 40% con la implantación del nuevo plan.
Como puede comprobarse y a la vista de los datos, resultaría muy complejo valorar una instalación de este tipo teniendo tan sólo en cuenta el coste de ejecución del proyecto. Con todo, en las instalaciones de fachadas ventiladas, el precio m2 suele oscilar entre los 70€ y los 118€, dependiendo de los materiales empleados y las subvenciones concedidas.
Ahorro energético estimado
Aislamiento acústico estimado
70-118€
Coste estimado sin subvenciones (€/m2)
30-40%
Porcentaje máximo subvencionable del presupuesto de ejecución material